TARJETAS CON MI NOMBRE, UN D.I.Y. MUY FÁCIL Y RESULTÓN

La semana pasada me di cuenta de que me iba a ir al Daisy Market, de que iba a conocer gente y de que posiblemente a algunos les hablaría de un nuevo proyecto que tengo entre manos y de que no tenía una triste tarjeta con mi nombre para darles. Pero a tan poco tiempo de irme no tenía mucha opción de diseñar y encargar nada, así que puse mi cerebro D.I.Y a trabajar y en un par de horas tenía listas 18 tarjetas y de rebote (descartando una opción para papel de tarjetas) me hice un postercito motivador.   

Usando una hoja grande de papel para acuarela, preparando acuarelas súper-diluídas de tonos bonitos, pintando al tun tún toda la hoja, esperando a que seque, estampando el sello con mis datos, dibujando en la parte de atrás un gatito en lápiz y recortando con unas tijeritas de formas te salen un montón de tarjetitas bastante dignas y absolutamente hechas a mano.

La segunda opción hubiera sido recortar triangulitos, esparcirlos por toda la hoja, sprayar encima y hacer el mismo proceso (sello, recorte, etc.). Como me convenció más la primera idea, esta otra la convertí en un letrerito con ese verbo que tanto me gusta y tanto me cuesta: perserverar. El I Ching siempre me dice que perserverar trae ventura, así que pensé que no me vendría mal recordarlo a menudo cuando siento que estoy hasta los mismísimos de todo y todos :)

Creo que a partir de ahora haré tarjetitas a mano y cada vez cambiaré el diseño. Como tampoco soy comercial no es que necesite millones de ellas, así que por qué no intentar ser un poco original si justo en eso consiste mi trabajo. 

Además, que me pasé un rato entretenida y motivada, cosa que no pasa siempre. ¡Todo son ventajas!¡Tenéis que probarlo!