EN ABRIL, BOCADOS DE REALIDAD CON LISETTE MODEL

Aquí os presento otro de los posts de las lectoras, muy chulo y todo un descubrimiento! Si os creíais que la foto de streetstyle era cosa de hace dos días estabáis muy equivocados :) Nuria nos lo demuestra con este post!

 ¡Bonjour lector@s de Dumbo! La Parisina es el pseudónimo de Nuria Aragonès, soy parisina empedernida, historiadora de las artes escénicas y desde hace algún tiempo me especializo en comunicación y periodismo de moda. Viví durante diez años en la Ciudad de la Luz y del Amor, allí abrí mi blog, La Parisina, donde podéis encontrar mis rincones favoritos, recomendaciones, tiendas, exposiciones, escaparates y toda una vida parisina que me encanta compartir.
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Lisette Model (1901-1983)

“Fotografía con las tripas” aleccionaba Lisette Model a sus alumnos, entre los que se encontraban Bruce Weber y Diane Arbus. Esta era la única referencia que tenía yo de esta prolífica fotógrafa cuya retrospectiva se exponía en el Jeu de Paume de París. Fue suficiente para llamarme la atención, atravesar medio París en metro en hora punta (proeza), cruzar el jardín de las Tullerías, vislumbrar la enorme plaza de la Concordia al fondo y llegar a mi destino. Allí descubrí una personalidad totalmente inspiradora y muy humilde a la vez.

A Lisette Model se la podría considerar como una de las pioneras del Street Style, aunque quizás con unos objetivos distintos de nuestro Sartorialist actual. Sus métodos también eran distintos ya que Lisette jamás hablaba con la persona antes de sacarle la foto (“sino el instante no puede captarse”), afirmaba. Sus retratos de la gente bien que paseaba palmito por la Promenade des Anglais en Niza (foto 1) representan hoy día todo un documento social de los años treinta.

Pero para mí las fotografías más impactantes son aquellos retratos tomados en bares y clubs de jazz de Nueva York, como el Sammy’s o el Metropole Café (foto 2), en los años cuarenta. En estas fotografías se ve claramente un arte del instante, un acercamiento a un momento de realidad, sin juzgarla, sin decir si es buena o mala. Interesantísimas me parecieron también las fotografías de reflejos en los escaparates en la ciudad de Nueva York. Lisette cuenta que una de ellas (foto 4) la mandó a su hermana Olga para que viera como se vivía en la Gran Manzana. Son imágenes muy poéticas y que al mismo tiempo reflejan muy bien la realidad del bullicio de las calles neoyorquinas.

El mundo de la moda estuvo también en el punto de mira de nuestra fotógrafa, que trabajó para la revista Harper’s Bazaar hasta 1955. Me gustaron especialmente las fotografías de redactoras de moda y asistentes de los Fashion Shows (foto 5), aunque luego me sorprendió descubrir que Lisette no admiraba en absoluto este mundo glamuroso, como sería el caso de los fotógrafos de street style de hoy día, sino que más bien le producían compasión: “Probablemente llevan una existencia vacía”, afirmaba Lisette en una entrevista, unos años antes de su muerte. Siempre nos quedará el maravilloso retrato de Diana Vreeland (foto 6), entonces directora de Harper’s Bazaar, que nos permite espiar por una rendija y vislumbrar por un instante de esa era de la elegancia, que aún se prodiga a día de hoy.

Salí de las salas del Jeu de Paume cuando ya oscurecía, miré conmovida la torre Eiffel que tintineaba al otro lado del Sena, cogí aire y me sentí en plena sintonía con el mundo. Ya no concibo la historia de la fotografía sin Lisette Model.

Créditos de las fotografías:
Foto 1: Promenade des Anglais, Niza (1934) Vía Bli point
Foto 2: Café Metropole, New York (1946) Vía Bli point
Foto 3: Mujer con velo, San Francisco (1949) Vía Oda a Niepce
Foto 4: Reflection, New York (c.1939-1945) Vía Arte Creha
Foto 5: Fashion Show, Hotel Pierre New York (c. 1940-1946) Vía Oda a Niepce
Foto 6: Diana Vreeland, New York, 1945, Vía El ángel caído