EDUCAR A LOS NIÑOS PARA SER EMPRENDEDORES

En lo que parece ser "la semana de la educación" en Dumbo (y ya me parece bien que sea así, la verdad es que me parece el tema más importante de la humanidad ahora mismo), quiero compartir otro enlace a una conferencia de TED -soy fan, me pasaría horas y horas viendo vídeos- que guardé hace bastante tiempo y que nunca encontraba momento de sacar, fíjate tú, ahora parece más pertinente que nunca. 

Cameron Herold cuenta algo que me parece importantísimo. Yo creo que está bien que haya obreros, está bien que haya gente que trabaje para otras personas, está bien que haya unos por encima y unos por debajo y que cada uno ocupe el puesto hasta el que pueda llegar y el que se le de mejor. Pero pienso que hay un vacío muy grande cuando se trata de enseñar a los niños -y a las personas- a que sean autónomos y tomen riesgos y se forjen sus propios caminos. No se nos enseña a pensar por nosotros mismos y a fomentar aquello en lo que somos buenos. Él dice que cuando estaba en segundo ganó un concurso de oratoria, y en lugar de decirle "ey, eres bueno animando a la gente, ¿por qué no investigas este campo? entrénate para hacerlo aún mejor" le pusieron un profe particular de francés, porque siempre suspendía. Y le obligaban a pasar más tiempo haciendo las cosas que peor se le daban y las cosas que él detestaba, lo que es, a todas luces, un GRAN ERROR.

Y siempre soñamos con ser médicos o bomberos o maestros o bailarines porque nunca nadie nos enseñó que había otra posibilidad para los que tenemos otras características, los que nos gusta tener ideas, los que odiamos la monotonía, los que no soportamos que nos den órdenes. Si a mi me hubieran enseñado que se podía "ser emprendedor" y que estaba bien que nada me gustase lo suficiente y que a la vez me gustasen muchas cosas y que no pasaba nada si un curso quería estudiar violín y al otro ballet y al otro cerámica y el mes siguiente submarinismo (y me hubiesen permitido probar todo aquello sin hacerme sentir una indecisa y una caprochosa), quizás muchas de mis angustias de adolescencia se hubieran esfumado.

Cómo él dice, "hay que enseñar a los niños a pescar en lugar de darles el pescado", y hay que orientar a los niños que piensan cosas y quieren hacerlas realidad, esos que quieren luchar por las cosas en las que creen, los que quieren vender limonada para comprarse un juguete, los que tienen algo y sueñan con algo más grande y no se quedan parados pensando sino que hacen cosas para llegar a lograrlo, a esos niños hay que detectarlos pronto y darles cancha porque ellos serán los que moverán los negocios del futuro, los que activarán la economía con sus ideas y los que no se acobardarán ante palabras como "crisis" porque ellos al oírla sólo entenderán "oportunidad".

Y yo, la verdad, sueño con que mis hijos sean emprendedores y monten y desmonten negocios y tengan y olviden ideas, pero también con que sean médicos o bomberos o maestros o bailarines. En realidad sueño con que encuentren pronto aquello que les haga sentirse libres y únicos.Y espero que vuestros niños también lo encuentren y dentro de unos años tengamos un país prácticamente perfecto.