Hola Olga,
¡Te he conocido a través del blog de Dumbo y me ha dado confianza! Te cuento brevemente mi situación.
Tengo 29 años, vivo en pareja en una ciudad diferente a mi ciudad natal y me veo muy afectada porque mis relaciones familiares condicionan muchísimo mi estado vital y anímico.
Mi madre, con la que tenía una complicidad total, murió de un cáncer bastante repentinamente hace 2 años. Desde entonces, he tenido que "construir" una relación con mi padre, con quien anteriormente apenas tenía comunicación directa y establecer vínculos afectivos nuevos, lo que me resulta bastante complicado y en ocasiones, consigue frustrarme.
Por otra parte, mi único hermano, mayor que yo, siempre ha generado problemas en la familia por su conducta irresponsable, su carácter complicado y su poca demostración de afecto familiar. Él también vive fuera y además, bastante más lejos.
Entre él y yo tenemos una mejor relación, en parte porque soy perseverante y trato de mantenerla a pesar de todo, pero entre mi padre y él apenas hablan, lo que me sitúa en una posición complicada. En general, me siento muy frustrada e impotente ante toda esta situación, y esto está afectando a mi día a día y a mis planes de futuro, ya que siento que llevo una carga detrás de la que no puedo desvincularme.
¿Cómo puedo canalizar toda esta situación sin que me haga sufrir tanto? ¿Cuál es la actitud que debería tomar ante las relaciones entre mi hermano y mi padre?
¡Muchas gracias por escucharme!
N.
de aquí |
Querida N,
No sé a qué te refieres cuando dices que esto te sitúa en una “posición complicada”. ¿Presionan ellos para que intervengas? ¿Cedes tú a esa presión? ¿Sientes que tienes la obligación de hacer que la relación entre ellos (dos adultos) funcione? Y de ser así, ¿por qué te asumes la responsabilidad de la vida de otras personas? Por lo que dices, parece que estás asumiendo una responsabilidad que no es tuya, la de la relación entre tu padre y tu hermano. Tú te has esforzado por construir una buena relación con ambos, pero por los motivos que sean ellos han decidido no hacer lo mismo. Así pues, no me extraña que sientas que llevas una gran carga a tus espaldas, pues es una carga que no te pertenece.
Lo cierto es que no podemos hacernos cargo más que de nuestra propia vida; lo que ocurre es que a veces queremos asumir el papel de “Salvador” de otros, y a veces a esos otros también les va bien que alguien quiera salvarlos, así pueden seguir desempeñando su papel de “Víctima”. Reconocer en cuál de estos papeles te sitúas tú y los demás no siempre es fácil, y requiere de mucha honestidad consigo mismo.
Te propongo un ejercicio muy sencillo, pero muy revelador si reflexionas sobre lo que te mueve después de hacerlo. En lugar de decir: “Llevo una carga detrás de la que no puedo desvincularme”, prueba a decir en voz alta “Llevo una carga detrás de la que no QUIERO desvincularme”. ¿Cómo te suena? ¿Habría algo de verdad en eso? ¿Por qué no querrías desvincularte de esa carga? ¿Es algo que haces normalmente en tu vida, asumir las cargas de otros?
Soy consciente de que te he hecho muchas preguntas, y de que algunas pueden resultar muy nuevas para ti y hasta te confundan. Si deseas compartir alguna de tus reflexiones al hilo de mi respuesta y necesitas una réplica por mi parte, tienes derecho a hacerlo una vez más en el apartado de comentarios. Te responderé con gusto.
Para terminar, quiero dejarte con esta reflexión extraída de un libro:
“Los demás hacen lo que quieren hacer. Se sienten como se quieren sentir (o como se están sintiendo), piensan lo que quieren pensar, hacen las cosas que creen que necesitan hacer y cambiarán sólo cuando estén listos para cambiar. El hecho de que no tengan razón no importa. Tampoco importa que se estén lastimando a si mismos. No importa el hecho de que nosotros podríamos ayudarles si nos escucharan y si colaboraran con nosotros. La única persona a la que puedes o podrás cambiar es a ti mismo. La única persona a quien te corresponde controlar eres tú.”
Un fuerte abrazo.
Olga.
Yo considero, que le das demasiada importancia.
ResponderEliminarLógicamente es inevitable que te influya, pero no sé porque me da la impresión, que en toda esta situación eres la única que lo está pasando mal.
¿No se comunican?
Pues que o se comuniquen. Te llevas bien con los dos y así sigue. Ya se lo harán.
que facil es a vegades barrejar la familia amb obligacions que un mateix s'imposa i que concidera coherents. Al final (muerte) només ens queda la familia, ara que es consideri familia això ja es més personal.
ResponderEliminarMe siento identificada con tu problema N. En mi caso, son mis padres y mi hermana q no se llevan bien.
ResponderEliminarHasta hace unos años, cuando se peleaban, se tiraban unas semanas sin hablarse y se les pasaba. El problema ahora es q mi hermana tiene un niño, y lo usa para chantajear a mis padres cuando se enfrentan a ella, negándoles el poder verlo cuando no consigue lo q quiere.
Durante toda mi vida, tanto mis padres como mi hermana me han usado como mensajera entre ellos, pq yo nunca he tenido problemas con ninguno de ellos. Esto ha provocado q yo haya tenido q asumir la responsabilidad de unos problemas q ni era provocados por mí ni eran asunto mío. La consecuencia de todo ha sido q yo he tenido q acabar yendo al psicólogo para saber cómo salir de esa dinámica. Sinceramente te recomiendo, si puedes, q visites a uno para q te de las claves de cómo manejar este tema sin tener q renunciar a la relación q tienes con ninguno de ellos.
Tienes q poner distancia y pensar q es gente adulta q ha tomado una decisión, y tú no tienes q ser la persona q les saque las castañas del fuego. Yo lo estoy haciendo desde hace unos meses y te aseguro q da resultados. Y si te comentan algo al respecto, decirles las cosas tal y como son: tú has decidido obrar de esta manera y yo no tengo q ser la q limpie tu m-r-d, te la limpias tú solito/a.
Espero haberte ayudado.
Gracias Olga y gracias también a las demás por los comentarios!
ResponderEliminarEn realidad tengo que reconocer, Olga, que las cuestiones que me planteas las conozco de algún modo y la respuesta a "sueles asumir las cargas de otros?" es "Sí, lo suelo hacer". Digamos que me se la teoría pero la cuestión es que no consigo aplicarla en la práctica...¿puedes sugerirme alguna idea?
Aunque intento desvincularme, me resulta tan dificil y duro, y me siento tan "falsa" haciendo como que el asunto no va conmigo que me hace sentir fatal.
Por supuesto, supongo que en todo esto influye totalmente mi nueva situación familiar, con la pérdida de mi madre, que era la persona que suponía mi "hogar" ya que aunque antes todo esto me afectaba, ahora es mucho más pronunciado.
El año pasado inicié una terapia con una psicologa durante 2 meses pero no me sentía a gusto y al final lo dejé. Supongo que debería intentarlo de nuevo...
gracias otra vez,
N
Querida N,
ResponderEliminarDe todas las preguntas que te he formulado y las reflexiones que te propongo, para mí la más importante y difícil de responder es: en lugar de decir “Llevo una carga detrás de la que no puedo desvincularme”, prueba a decir en voz alta “Llevo una carga detrás de la que no QUIERO desvincularme”. ¿Por qué no querrías desvincularte de esa carga?
Dices que no te reconoces a ti misma descargándote de una carga que no te corresponde, pues dices que te sientes falsa si lo haces. Entonces, parece que tu identidad pasa por hacerte cargo de los demás, y empezar a verte de otra manera va a requerir cierto trabajo. Por tanto, para empezar, te invito a que pases un tiempo intentando responder a la pregunta de arriba. Dicho de otro modo: ¿En qué te beneficia actuar así? (No vale decir, “en nada, me hace daño”, sencillamente porque si no te beneficiara en nada te aseguro que no lo harías). Repito que la pregunta es difícil, pues la respuesta que sale de inmediato es “en nada”. Cuando veas eso, seguro que vas a empezar a entender más cosas.
Un fuerte abrazo.
Olga.
¿De qué libro es el extracto?
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