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Si esta sección fuera “Tu empresa handmade”, hoy me dedicaría a hablar del inventor de Facebook, de los jóvenes estudiantes de Harvard cuyo único anhelo es salir de la universidad con un proyecto millonario, de las envidias y el robo intelectual. Estaría hablando de ‘La red social’, peliculón de los pies a la cabeza. Pero como esta sección lleva por nombre “La in-culta”, trataré de escapar del argumento y me centraré en otras cositas.
EL DIÁLOGO
‘La red social’ es lo más y eso que comienza con una conversación. Así, a palo seco. Creo que ya dije que no me gustan las películas en las que hablan mucho (o mejor dicho: en las que sólo hablan), pero en esta ocasión la palabra cobra un carácter especial. Los diálogos fluyen a un ritmo feroz y las conversaciones se convierten en el espejo de toda una generación gracias a líneas perfectas y ácidas. Como aquella en la que el creador de Napster, Sean Parker, se declara victorioso tras su juicio contra las discográficas: “ganaron ellos”, le corrige uno; “¿de veras? ¿te atreves a montar una tienda de discos hoy en día?”, responde Sean.
Por cierto, Sean Parker está interpretado por Justin Timberlake, al que ya va siendo hora de tomar en serio como actor. Y el guión lleva la firma de Aaron Sorkin, creador de ‘El ala oeste de la casa blanca’, otra crítica punzante a las altas esferas yankis.
EL DIÁLOGO
‘La red social’ es lo más y eso que comienza con una conversación. Así, a palo seco. Creo que ya dije que no me gustan las películas en las que hablan mucho (o mejor dicho: en las que sólo hablan), pero en esta ocasión la palabra cobra un carácter especial. Los diálogos fluyen a un ritmo feroz y las conversaciones se convierten en el espejo de toda una generación gracias a líneas perfectas y ácidas. Como aquella en la que el creador de Napster, Sean Parker, se declara victorioso tras su juicio contra las discográficas: “ganaron ellos”, le corrige uno; “¿de veras? ¿te atreves a montar una tienda de discos hoy en día?”, responde Sean.
Por cierto, Sean Parker está interpretado por Justin Timberlake, al que ya va siendo hora de tomar en serio como actor. Y el guión lleva la firma de Aaron Sorkin, creador de ‘El ala oeste de la casa blanca’, otra crítica punzante a las altas esferas yankis.
LO SUTIL
Lo genial de ‘La red social’ es que adopta el ritmo vertiginoso de nuestros tiempos. Bajamos películas en un clic, compramos cualquier cosa en dos y en tres ya hemos quedado con el chico que conocimos durante el fin de semana. De la mano de David Fincher, la creación de una web avanza como si fuera una crucial persecución de coches, y la aparición de Sean Parker transcurre bajo el ritmo de una música que se corta en seco en cuanto este desaparece.
En ‘La red social’, Sorkin y Fincher dibujan justamente eso: las relaciones sociales, las envidias y los celos. Las miradas entre amigos siempre establecen un vínculo o una distancia y el plano contra plano (la herramienta básica del cine clásico para transmitir la idea de enamoramiento, el “chico conoce chica” hecho imagen) se pone al servicio de las turbias relaciones contemporáneas.
Mark Zuckerberg, un chaval de pelo rizado y sudadera, se ha convertido en una de las personas más influyentes y ricas del planeta. Un geniecillo, un joven antisocial capaz de crear una empresa de éxito por puro despecho amoroso. David Fincher (director) y Aaron Sorkin (guionista) han aprovechado la coyuntura para poner el dedo en la llaga de las nuevas (autistas y engreídas) generaciones y demostrar que ellos son los auténticos genios de ‘La red social’.
Lo genial de ‘La red social’ es que adopta el ritmo vertiginoso de nuestros tiempos. Bajamos películas en un clic, compramos cualquier cosa en dos y en tres ya hemos quedado con el chico que conocimos durante el fin de semana. De la mano de David Fincher, la creación de una web avanza como si fuera una crucial persecución de coches, y la aparición de Sean Parker transcurre bajo el ritmo de una música que se corta en seco en cuanto este desaparece.
En ‘La red social’, Sorkin y Fincher dibujan justamente eso: las relaciones sociales, las envidias y los celos. Las miradas entre amigos siempre establecen un vínculo o una distancia y el plano contra plano (la herramienta básica del cine clásico para transmitir la idea de enamoramiento, el “chico conoce chica” hecho imagen) se pone al servicio de las turbias relaciones contemporáneas.
Mark Zuckerberg, un chaval de pelo rizado y sudadera, se ha convertido en una de las personas más influyentes y ricas del planeta. Un geniecillo, un joven antisocial capaz de crear una empresa de éxito por puro despecho amoroso. David Fincher (director) y Aaron Sorkin (guionista) han aprovechado la coyuntura para poner el dedo en la llaga de las nuevas (autistas y engreídas) generaciones y demostrar que ellos son los auténticos genios de ‘La red social’.
¡Yo voy al cine dentro de unas horas! Y vosotros, ¿ya la habéis visto? (por cierto, que me encanta la frase del poster...)
No he prestado mucha atención a esta película (en casa cuando no hay dibujos en la tele es difícil poder escuchar algo). Tampoco me llamaba mucho, pero la has pintado muy bien. Así que si se puede se irá.
ResponderEliminarno pensaba verla, pero tras este artículo es posible que cambie de idea
ResponderEliminarHay que verla :)
ResponderEliminarLa vaig veure ahir. No em va agradar. Es una peli de dalt a baix, bons actors, bon guio, bon director... però a mi per explicar-me la historia de facebook... poz me la llegeixo un dia a la wikipedia. Com podeu veure es molt personal, si t'agrada al cine ves-hi. (tot i que a més a més se'm va fer llarga)
ResponderEliminarmmm...
ResponderEliminarla habia descartado totalmente, pensaba que era una chorrada para adolescentes, pero igual me lo replanteo. (aunque siendo de esa generación, reconozco que no creo que vaya al cine a pagar 6 eurazos :S)
Aún no he podido ir a verla, pero tengo unas ganas, no paro de oír cosas buenas de ella así que en cuanto pueda voy!
ResponderEliminarIntentaré encontrar un ratito para ir al cine si me lo recomiendan en mi sección favorita de Dumbo :-)
ResponderEliminarAnónimo: entenc que se't fes llarga... 'La red social' és una pel·lícula molt neta i clàssica. Ara bé, crec que no li interessa tant explicar la història de Facebook com descriure tota una generació (i en un context, el dels nens mimats de Harvard)!
ResponderEliminarA mi me gustó mucho, sobre todo por la rapidez y los diálogos del prota; su ironía,y mordacidad derrochaban inteligencia...eso me fascina en el cine y en la vida.
ResponderEliminarEl "pero", que también puso el propio inventor de Facebook en una entrevista, es lo poco creíble que resulta pensar que él lo creó por un despecho amoroso.No cuadra.
Yo, una que no tiene facebook
M'han entrat ganes d'anar-hi:)
ResponderEliminar"De la mano de David Fincher, la creación de una web avanza como si fuera una crucial persecución de coches"...simplemente genial, In-culta! Fan de los actores, el chaval de Adventure/Zombie-land es lo más, San Justin Timberlake es de nota y atención al próximo Spiderman-Edwardo Saverin!
ResponderEliminarPues el papelón de las tías de la película deja muuucho que desear...todas (excepto una) están en universidades top pero no tienen un gramo de cerebro, son la comparsa de los chicos, o parte de la decoración del apartamento...si eso refleja a esa generación estamos perdidas...
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