MAD GIRLS: MI SELECCIÓN DE CIBELES (parte 1)

Teresa Helbig. Porque el blanco (cuando no es el típico lino ibicenco) sino una seda vaporosa, es muy guay. Y porque blanco y camel es más guay si cabe y porque mirad como caen. Supersexy.

 TCN, porque los colores son para morirse, las capas y las alturas están perfectamente pensadas y porque sientan de muerte aunque no tengas la misma talla que la modelo.

     

 Sita Murt, porque, como siempre, la calidad del punto se ve a la legua, porque lo usa de la forma más elegante posible y porque los brillos en ella dejan de ser chabacanos.

 Martin Lamothe, porque dentro de la rareza, estos dos conjuntos tienen primero un color espectacular y segundo un corte y textura (respectivamente) poco comunes pero interesantes.

 Lluis Corujo, porque a pesar de que la colección en conjunto no me ha seducido demasiado, el efecto plumas de colores y el efecto años 20 Charleston aún tienen su punto.

Ion Fiz, porque como siempre, se trabaja los patrones y las estructuras hasta el máximo, y porque el chico es moderno y porque sí. Nunca puedo decirle que no aunque sólo sea por salvar 4 modelitos.

Elisa Palomino, porque hay algo ahí que (aún siendo demasiado extremado para mi gusto) no acabo de situar pero que tiene un aire agradable y fresco sin hacer espantajos que ya solo por eso merece un sitio aquí en mi lista.

Diana Dorado, por el amarillo sol de una parte de su colección con drapeados dignos de Vionnet, y por la silueta y los colores ligeros de la otra parte.  

Cruz Castillo, porque me parece ultramoderno el tema inca (o maya, lo que sea), porque las pirámides de esa camiseta me vuelven loca (la quiero YA), y por usar el azul marino mezclado con esos otros colores flúor para quitarles importancia y rematar un look llamativo pero elegante.

Bohento, porque no hace falta decir que esa paleta de color es sin duda mi preferida de las vistas hasta ahora y porque los nudos y el corte de todas las piezas, tan holgado y femenino a la vez, me parecen de 10. Podría haber escogido más looks porque la mayoría son cuasi-perfectos (excepto por el look rulos en la cabeza que no no).

Cati Serrà, por jugar tan bien con las transparencias del punto.

Beba's Closet, por este vestido que salva una colección aceptable pero demasiado de "cocktail, bodas y comuniones" para mi gusto. En cambio, este vestido es LO MAS de color y de forma y de tejido y de todo.

Antonio Alvarado, porque también pese a ser un poco raruno sus propuestas de siluetas son llevables y tienen un punto de sobriedad que es de agradecer.

Adolfo Dominguez, porque aunque no iba a sacarlo porque de repente me ha recordado demasiado a la Ana Locking de otoño-invierno y a un Balenciaga resort de hace unas temporadas (ahora creo que era Balenciaga, tendré que buscar mis archivos pero de momento lo lanzo así y si no que alguien me corrija), el señor Domínguez es siempre elegante y resultón. ¡Vivan  los cuellos en "V"!

Los que no están aquí y han desfilado estos días en Cibeles o en Ego es directamente porque no entran en mis preferencias (me sabe mal por ejemplo American Pérez pero esta nueva colección no es para nada de mi gusto).  Estad atentas a la segunda parte que vendrá en breve, cuando termine todo el tinglao (y ya sé que hay algunas fotos descuadradas pero yo no sé el blogger qué me hace que no puedo arreglarlo).